El matrimonio es al amor lo que el vinagre al vino. El tiempo hace que pierda su primer sabor.
Lord Byron
sangre de topacio: muy fino, el caballero anglosajón. Gracias a Dios, hay matrimonios que envejecen "gloriosamente", con el tiempo. No sólo mejoran el sabor, sino que, lo completan de forma espectacular. Ayer asistí al nacimiento de Tomás, el dieciseisavo hijo, de un gran matrimonio. Al parecer, no han perdido el tiempo, ni el "primer sabor" ;) Felicidades Rosa y Josemaría!!
martes, 10 de octubre de 2006
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3 comentarios:
@ Merche, se lo haré llegar de tu parte. Aunque quizás te lean... les he dicho que el nombre de su hijo TOMÁS, ya sale en Internet!
No te imaginas el "amor" que se respira en esa casa. Los divertidos turnos de desayuno, comida y cena. Cuando el padre enciende el PC, acuden 6 mínimo! ;)
Las habitaciones con literas de 4, optimización total del espacio.
Algún guionista o Director sacaría un peliculón... la pena que esos ejemplos no se conozcan más!
Besos "numerosos"
¿Dieciséis?... ¡glub!
JS, ya te puedes ir poniendo las pilas... que tu has empezado con 3 en la carrera ;)
Saludos "multitudinarios"
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